La columna de Andrés Salas
El 18 de noviembre de 2011, Jesús Corona era regidor del municipio de Cuautla y ese día, votó a favor de la instalación en el Centro de la ciudad y también, de llevar a cabo una licitación para que una empresa desarrollara el proyecto y cobrara 12 pesos por hora a quien se estacionara en la vía pública de las calles del primer cuadro de la ciudad.
Fue en la sesión extraordinaria número 89, con fecha del 22 de agosto de 2012 que se aprobó por unanimidad el que la empresa IBERPARKING S. A de C.V fuera la ganadora de la concesión. Corona Damián, también votó a favor del proyecto.
Tras darse a conocer que se instalarían los parquímetros, un movimiento ciudadano inició acciones legales y movimientos sociales para impedir que operará el cobro por estacionamiento en la vía pública.
Tras varios años de litigio, se llegó a la administración donde Jesús Corona Damián se convirtió en presidente municipal, ahí decidió darle un respiro a la empresa de parquimetros que estaba perdiendo el juicio y junto con 8 miembros del Cabildo administración 2019-2021; celebraron un adendum con “Parking Spot”, mediante el cual autorizaron pagos parciales al adeudo que se tiene con dicha empresa, sin embargo, dentro del mismo, se encontraba una cláusula que señalaba, que en el supuesto de omitir algún pago en una de las fechas programadas, se dejaría sin efecto el total que fue depositado previamente, renovándose nuevamente la deuda con la empresa en cuestión, perdiendo el municipio de Cuautla, Morelos, pagos por un monto que asciende a los 46 millones de pesos. Es decir, un contrato a modo y que apesar de ello, Jesús Corona decidió firmar.
Casi al final de su administración, la empresa debía instalarse y operar, pero Jesús Corona buscaba la reelección, por lo que le puso un tope a la empresa y esta no logró entrar en operaciones, pues de haberlo hecho hubiera sido un golpe para Corona Damián. Finalmente el presidente municipal no consiguió la reelección y avanzó en los tratos con la empresa.
A la llegada de Rodrigo Arredondo, se descubrieron los vicios que marcaban el adendum y el contrato y el Ayuntamiento entabló nuevamente acciones legales para buscar ganar y evitar la instalación de parquimetros. El litigio continúa y a Cuautla le faltan 46 millones de pesos qué Jesús Corona le regaló a la empresa.
Sería un peligro para la ciudad y sus recursos si en la próxima administración se comete un error similar; el dinero del pueblo se cuida y no se debe dejar en manos de personas que no saben cuidarlo. Ya sabemos como es que Jesús Corona Damián se hizo abogado y es preocupante qué ni un contrato sepa leer o es que se hizo ojo de hormiga. Ya lo decía mi abuelita: «El que traiciona una vez, traiciona dos veces». Hasta la próxima.