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Giovanni Lezama, buen político, maravilloso padre, excelente amigo

La columna de Andrés Salas

Era apenas el año 2003, Giovanni y yo, eramos unos jóvenes de apenas 17 y 18 años, lo conocí en un cabildo en Cuautla, acompañaba a su mamá la entonces regidora Juana Barrera Amezcua a todos los eventos, tanto él como yo, buscábamos aprender a hacer política, o el arte de la política; un joven delgado, de estatura media, con un carácter muy noble, amable y bondadoso.

Con el paso de los años, Giovanni y yo, nos convertimos en grandes amigos, en confidentes; juntos hicimos un grupo de cuates que fue creciendo con el paso de los años. Nos reuníamos cada que podíamos y en las fechas especiales. Viajamos a varios lugares, siempre algo caracterizó a Giovanni, su fácil forma de atraer amigos y de apapacharlos. Gio nunca dejó solo a un amigo en algún momento difícil.

Su hija nació y la vida le cambió para bien, un padre siempre responsable, amoroso y enamorado de su familia. Jamás me voy a olvidar de la vez que le dije que era momento de pedirle matrimonio a la mamá de su hija. Vivimos momentos muy felices.

Hace algunos meses, Giovanni me platicó que tenía la intención de participar en la elección del 2024, quería ser Diputado.

Ayer, Giovanni, fue asesinado a balazos mientras hacia ejercicio en un gimnasio en el Centro de Cuautla, a plena luz del día. Giovanni se ha convertido en parte de las cifras, pero lo más triste, es que ayer, no mataron a un funcionario, ayer, le quitaron a una niña de 7 años a su papá, le quitaron a un hijo a su mamá, ayer, le quitaron a su esposo a una mujer, ayer, ayer, me quitaron a mi amigo y estoy seguro, que ayer, le quitaron a Cuautla a un buen político.

Que triste y que lamentable lo que vive Cuautla ¿hasta cuando chingaos vamos a seguir así? ¿hasta cuando continuará este miedo a salir a las calles en Cuautla? ¿Quién se va a hacer responsable de lo que pasa en esta ciudad? Con todo respeto a las autoridades les digo aquel mensaje que el empresario Alejandro Marti lanzó a las autoridades: Si no pueden ¡RENUNCIEN!