•SCJN les amarró las manos al ordenar cancelarlo por no ser equitativo.
La columna de Andrés Salas
La Suprema Corte de Justicia de la Nación ordenó detener como medida cautelar, el llamado Fondo de Infraestructura Municipal que los diputados locales se sacaron de la manga para beneficiar solo a 15 de los 36 municipios en Morelos, pero donde además solo Yautepec, Cuernavaca y Yecapixtla eran beneficiados con la mayoría del presupuesto aprobado para tal fondo.
Sin duda, lo que la corte hizo, fue evitar, que se cometiera una injusticia con 26 municipios que no fueron considerados en ese fondo por así convenir a los intereses de los diputados, mismos que debieron ser justos y dotar de recursos a cada uno de ellos.
Los legisladores salieron a tratar de controlar la crisis dando entrevistas y diciendo que el presupuesto aprobado por ellos está firme, presumen como un trofeo el haber retirado las libres transferencias al Gobernador de Morelos y hasta aseguran que fue un presupuesto histórico, lo cual no lo niego, pues jamás en la historia de la entidad, se había visto a un grupo de hombres y mujeres tan hambreados; pues de los 15 municipios a los cuales «beneficiaron» con el llamado Fondo de Infraestructura Municipal, trascendió que pidieron moche a cada uno de los alcaldes, en tanto a algunos otros, les pusieron a la empresa que realizaría la obra que les fue etiquetada.
Los y las legisladoras integrantes del G15, se convertirán sin duda en un referente de corrupción y lo que pasará en los próximos meses, solo será el costo político qué sufrirán por haber engañado al pueblo de Morelos con sus falsos discursos de transparencia, honestidad y en algunos casos el amor por el proyecto a la cuatro T.
Las obras que ya iniciaron en algunos municipios seguramente tendrán que ser canceladas o en su caso, los y las presidentes municipales, tendrán que absorver el costo de las obras, pues todo indica que la SCJN invalidará definitivamente el fondo creado por los diputados y eso sin duda, será un golpe para sus bolsillos que les dolerá mucho. Que triste es ver como los legisladores que deberían representar dignamente a los ciudadanos muestren su hambre y sed de dinero de esa manera, pero ya lo decía mi abuelita: «Gallina que pica huevos, aunque le quemen el pico». Hasta la próxima queridos lectores.