El general José Rodríguez Pérez fue detenido por su presunta responsabilidad en los crímenes contra los normalistas de Ayotzinapa. Se trata del primer militar de alto rango aprehendido por este caso, informó el jueves el subsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía Berdeja, durante la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El subsecretario señaló que se han otorgado cuatro órdenes de aprehensión contra militares por lo suscitado en la llamada Noche de Iguala –de 20 contra elementos castrenses que solicitó la Fiscalía General de la República–, a raíz del informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa (Covaj), de las cuales se han ejecutado tres, una de ellas la del general.
Rodríguez Pérez fue comandante del 27 Batallón de Infantería de Iguala. De acuerdo con el reporte de la Covaj, presuntamente ordenó la ejecución y desaparición de los últimos seis estudiantes que se mantuvieron con vida en un lugar conocido como “bodega vieja”, hasta cuatro días después de los hechos suscitados la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014.
Este mando castrense también mantuvo comunicación con integrantes de la organización criminal Guerreros Unidos y respondía a las órdenes del general Alejandro Saavedra Hernández, quien en 2014 era comandante de la 35 Zona Militar, con sede en Chilpancingo, y tuvo conocimiento de lo ocurrido aquella noche.
Además, obstaculizó las investigaciones posteriores. El 28 de septiembre, un agente del Ministerio Público Federal se presentó en las instalaciones del batallón para realizar una inspección en busca de los normalistas, pero Rodríguez Pérez le impidió la entrada “por motivos de seguridad nacional”.
Un año después, en noviembre de 2015, este jefe militar fue ascendido por el gobierno de Enrique Peña Nieto a general brigadier.
El general y otros dos elementos del Ejército detenidos por su posible vinculación en la desaparición de los normalistas se encuentran recluidos en la prisión del Campo Militar No. 1-A, pero serán procesados en el fuero civil, en el juzgado segundo de procesos penales federales, en Almoloya, estado de México.
El general se entregó a los agentes de la Policía Federal Ministerial a las 13:45 del miércoles pasado, y conforme a la ley, fue ingresado a la prisión militar, según el Registro Nacional de Detenciones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Los militares detenidos deberán comparecer, presencialmente o por videoconferencia, ante el juez federal Enrique Beltrán Santés, quien solicitó su detención, y que llevará su proceso, pues como las presuntas víctimas eran civiles, el juicio se llevará ante un juez del fuero civil.
Por otro lado, Mejía Berdeja indicó que será investigado el juez Samuel Ventura Ramos, quien ha absuelto a 98 implicados en los hechos, entre ellos el ex alcalde de Iguala, Guerrero, José Luis Abarca.
El subsecretario enfatizó que el ex alcalde de Iguala no saldrá de prisión, pues se impugnará la decisión del juzgador.
Agregó que se va a interponer una queja ante el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) en contra de este juez.
Al respecto, el presidente López Obrador consideró que las decisiones del juez Ventura Ramos son “de esas cosas extrañas aunque sean legales”.